Ser mejor y feliz, parte final


En esta última entrega estamos seguros que la práctica hace al maestro y en este caso, te hará feliz o por lo menos estarás viajando más ligero con las situaciones incomodas del día a día. Sigue poniendo en práctica estas recomendaciones:

Procura ver la televisión no más de media hora al día

Mejor entretente con algo relacionado con el mundo real. Los mejores recuerdos nos dejan los acontecimientos agradables que nos pasan en la vida real. Así que apaga tu televisión (o la computadora si la utilizas para ver programas), y sal afuera. Ve el mundo, disfruta la naturaleza, acepta las alegrías sencillas que te puede ofrecer la vida.

Proponte alguna meta que sí vale la pena y trabaja en ella al menos una hora al día

Divide tu meta en pequeños pasos y concentrate en dar un paso a la vez. Si, así, despacio, paso por paso, así llegarás a la meta más rápido. Pero dar el primer paso por lo general es lo más difícil. Intenta dedicarle al menos una hora al día de tu tiempo a lo que quieres lograr. Empieza a trabajar en volver tus sueños realidad.

Lee un capítulo de un buen libro cada día

Ahora que internet nos abre la ventana a una infinidad de información, artículos, diálogos y discusiones, las personas pasan cada vez más y más tiempo leyendo en línea. Y aún así esto no puede sustituir la sabiduría de algunos libros clásicos que comparten (y seguirán compartiendo) su sapiencia de generación a generación. Los libros nos abren muchas puertas, tanto en tu mente como en tu vida. Has una buena selección y disfruta de la lectura. Una vez terminado uno escoge otro.

Observa o lee cada mañana algo que te inspire a lograr nuevas metas

A veces para llenarte de energía para el próximo día necesitas muy poco. Por lo tanto, antes de salir de casa mira algún video para motivarte o simplemente lee algo por el estilo (frases, citas, cuento corto, etc.), algo que te pueda inspirar.

Después de la comida, haz algo que te haga sonreir

Ve algún video, lee tu cómic favorito o busca algunas nuevas bromas en internet. Una risa sana estimula tu cerebro y recompensa tus reservas de energía. Y es mejor si lo haces después de comer porque es justo cuando más energía necesitas.

Recuerda que la única manera de comprobar que todo esto funciona es intentándolo. Suerte y disfruta tu experiencia.




¿Tienes alguna duda o inquietud?
Nos interesa escucharte

contacto@jetaccess.com